Souren Araya (荒耶宗蓮, Araya Sōren?) es el principal antagonista de Kara no Kyoukai.
Perfil[]
Biografía[]
Souren es un ex monje budista procedente del budismo tamil que ha vivido alrededor de 300 años. Fue testigo de una muerte sin fin, y esto le dio el retorcido propósito de encontrar una razón para la muerte humana. Terminó siendo excomulgado por su maestro porque vio el origen de las personas.
Más tarde ingresó a la Torre del Reloj de la Asociación de Hechicería en Londres, donde junto a Touko Aozaki y Cornelius Alba formaban parte del Departamento de Arqueología bajo la enseñanza de la profesora Inorai Valualeta Atroholm. Al principio, Touko y Araya se interesaron el uno por el otro como compatriotas y comenzaron intercambiando puntos de vista como dos personas con ideales similares. Aunque sus caminos diferían, su relación era la de rivales que apuntaban hacia el mismo objetivo. Souren Araya intentó llegar a Akasha rastreando las raíces del alma, algo que está ahí pero no está, para llegar a una conciencia de grupo. Personalmente interesado en las familias de la Organización Cazadora de Demonios, fijó su mirada en Shiki Ryougi, con la intención de utilizar el conocimiento de su origen de la «nada» como su último recurso como medio para llegar a la raíz.
Durante 1995, se encuentra con Lio Shirazumi con la intención inicial de usar cualquier conocimiento que pudiera obtener de su origen de «consumo» luego de incitarlo a despertarlo. Lio fue la primera pieza de ajedrez que preparó Souren, y también la que guardó para el final. Habiendo casi llevado a Shiki a la muerte durante los asesinatos de 1995-1996, Araya impidió que Lio llevara a cabo sus asesinatos para evitar que causara más problemas en su plan. Es en este punto que Araya consideró que Lio era un fracaso, recurriendo al uso de otras personas para desviar la atención de Shiki mientras mantenía bajo control a Lio.
Más tarde, Araya se acercó a Fujino Asagami y Kirie Fujou, presionándolos para que despertaran sus habilidades innatas. Planeó que Fujino y Kirie lucharan contra Shiki con la esperanza de que pudieran superar el potencial interno de Shiki, pero también para que la contrafuerza pasara por alto sus propias operaciones al distraerse hacia el conflicto creado entre los tres.
En su intento de llegar al Akasha, realizó un experimento en un complejo de apartamentos en Kayamihama, ciudad Mifune. Usó el modelo de arquitectura de Touko para crear el Apartamento Ogawa. Las paredes del apartamento habían sido inscritas con patrones extraños que causaron que las personas entraran en depresión y se volvieran locos, lo que los llevó a la muerte.
Colaboró con Cornelius, quien era responsable del sistema en el departamento de Ogawa, a cambio de ayudar a matar a Touko. Araya creó el complejo de apartamentos y creó un bucle cíclico en el que los residentes títeres repiten su último día antes de morir como un medio para descubrir un acceso al Remolino de la Raíz.
Tomoe Enjou pudo escapar de la espiral repetitiva, algo que Araya no esperaba. Pero antes de que se fuera, Araya supuestamente le implantó una impresión inconsciente de tener interés en Shiki. Su plan es volver sobre el camino del Remolino de la Raíz usando los Ojos Místicos de Percepción Mortal. Para hacerlo, Araya planea trasplantar su cerebro al cuerpo de Shiki.
Apariencia[]
Souren parece ser un hombre de unos cuarenta y cinco años, pero ha vivido durante siglos. Tiene un rostro tallado por el dolor y un cuerpo inusualmente robusto para un hechicero, características que ejercen una inmensa presión sobre sus oponentes hasta el punto de parecer casi nauseabundo.
Personalidad[]
Araya es una figura trágica. Originalmente un monje errante, su incapacidad para salvar la vida de tantos dio paso a la depresión. Su fe en la humanidad casi se derrumbó, había decidido recopilar conocimiento sobre el propósito de la vida como una forma de dar algún tipo de significado o propósito al ciclo interminable de muertes «sin sentido» a su alrededor. A pesar de que sus objetivos futuros se derivan de esta mentalidad y razonamiento exactos, durante muchos años llegaría a olvidarse de esto, solo recordándolo hasta el momento antes de su muerte.
Habiéndose convertido en hechicero, había internalizado por completo lo que normalmente es un objetivo común en la hechicería: localizar el Remolino de la Raíz. A diferencia de los hechiceros estándar, había aceptado plenamente este objetivo como su verdadera vocación, en la que tiene la intención de llegar al origen como un medio para provocar la destrucción de la realidad y, al hacerlo, el fin de la humanidad. Él cree que al provocar la destrucción de la realidad, podrá gobernar sus restos, creyendo que le permitiría ver los registros de la vida de cada ser humano individual en la Tierra. Al obtener este poder y gobierno sobre la realidad, desea identificar lo que él consideraría el momento más feliz — o al menos el punto culminante — de cada ser humano durante su vida, con la intención de traer una sensación de satisfacción y finalidad en su mente. Araya literalmente describió este objetivo como buscar «la verdadera sabiduría dentro de [él mismo]».
A pesar de parecer siempre tranquilo y sereno, Araya no estaba por encima de enmascarar sus propias emociones verdaderas. Mantuvo una imagen de indiferencia como medio para evitar que sus oponentes reconocieran sus momentos de fracaso y debilidad. A menudo se menciona que tiene una apariencia imponente; con Kirie viéndolo como un hombre rodeado por un vacío frío y oscuro, y con Fujino sintiendo miedo hacia su presencia a pesar de que rara vez lo hace hacia otra persona. La propia Touko comentó que él era «un hombre del infierno». Ella también lo describe como un hombre cuya naturaleza temeraria se presta a cometer errores en su metodología, pero su fuerte confianza es lo que le permite superar a los demás.
Si bien aparentemente se muestra actuando con genuina amabilidad en función de sus acciones hacia Lio, Fujino y Kirie, estas se realizaron para su propio beneficio, ya que solo estaba preocupado por usar a otros para alcanzar su meta. Por ejemplo, le mintió a Kirie sobre ser conocido de su padre y ayudó a pagar sus facturas del hospital después de la muerte de su familia, a fin de preparar todo para la victoria. Aunque Araya hizo un gran esfuerzo en su plan, no podía predecir que Shiki se enamoraría de una persona normal , o la pérdida de la primera persona que exploró, o la existencia de Tomoe Enjou; quien provocó su caída. Aunque parece que odia a los humanos, Touko refuta esa idea, alegando que solo está enamorado de la imagen ideal de la humanidad y es incapaz de tolerar a los humanos del mundo feo y vergonzoso. No lo hace por el bien de la humanidad, sino por sus delirios de un ideal inexistente. Llenando el vacío dejado por el vacío dentro de él, es un coleccionista excéntrico de la muerte.
Rol[]
Kara no Kyoukai[]
Capítulo 4[]
Antes de que Araya saliera del hospital, Araya estaba usando un cuerpo artificial haciéndose pasar por médico en el Departamento de Medicina Psicosomática. El fantasma que atacó a Shiki cuando despertó del coma fue obra de Araya.
Capítulo 3[]
En la adaptación al anime, Shiki recibió la tarjeta de identificación de Araya de Touko.
Capítulo 5[]
En noviembre de 1998, Tomoe lleva a Shiki a su apartamento donde supuestamente mató a sus padres. Sin embargo, Shiki le reveló la verdadera naturaleza del apartamento a Tomoe y reveló los cadáveres reales de su familia. Mientras estaban en el apartamento real de Tomoe, fueron atacados por cadáveres reanimados. Araya se encuentra con Shiki por segunda vez cuando mata a todos los cadáveres reanimados. Shiki tuvo dificultades para leer sus líneas de muerte debido a su Śarīra. Araya sometió a Shiki aprisionándola dentro de una barrera aislada del espacio. Permitió que Tomoe escapara porque sabía que sería cuestión de tiempo que expirara.
Cuando Cornelius fue noqueado por Touko, Araya intervino y enfrentó a Touko. Touko aparentemente lo derrotó con su máquina de proyección, pero Touko pronto se dio cuenta de que el Araya que derrotó era un títere. Más tarde, Touko fue incapacitado por el verdadero Araya cuando le sacó el corazón por detrás. Sin embargo, ella no murió ya que Araya la mantuvo congelada: la decapitó y guardó su cabeza en un frasco. No la mató porque sabía que el próximo Touko despertaría cuando el actual muriera. Destruyó la máquina de proyección de Touko al destruir su maletín. Le entregó la cabeza de Touko a Cornelius.
Cuando Tomoe entró al taller de Araya a través de las alcantarillas y encontró su cerebro original, Araya reveló la verdadera naturaleza de Tomoe como un títere. Araya afirma que el amor de Tomoe por Shiki es simplemente inventado y que simplemente imprimió tal deseo en la mente de Tomoe. Araya se burla de Tomoe para que lo confronte donde lo estará esperando en el décimo piso.
Cuando Tomoe toma el ascensor para enfrentarse a Araya, agarra el cuchillo de Shiki. Tomoe encuentra a Araya parada frente a él. Confirma su determinación de matar a Araya por su bien y la muerte de sus padres, alegando que no eran lo suficientemente pecadores como para morir de una manera tan cruel. Carga de frente, pero Araya usa su campo acotado para detenerlo. Las extremidades de Tomoe son arrancadas lentamente mientras logra apuñalar a Araya en el pecho. Eventualmente es asesinado por el poder de Araya, ordenando al cuerpo de Tomoe que deje de existir. Araya descubrió que Alba murió cuando conoció al próximo Touko.
Cuando Touko brindó primeros auxilios a Mikaya, Araya le preguntó a Touko si quería reanudar la pelea, pero Touko afirmó que era una tontería pelear con él nuevamente dentro del edificio, incluso si tiene la oportunidad de ganar con su Caja sellada. Araya pensó que Touko podría confiar en Counter Force y le dijo a Touko que su barrera lo alejaba del mundo exterior. Touko se ríe de Araya por su error de encarcelar a Shiki dentro de una barrera aislada del espacio en lugar de encerrarla físicamente. Ella le reveló a Araya que Shiki cortó su barrera, lo que le causó dolor desde adentro ya que el Departamento Ogawa está vinculado a su cuerpo. Debido a que Tomoe dejó atrás la katana de Shiki, Kanesada Kuji (九字兼定, Kuji Kanesada ?), dentro del ascensor del Apartamento Ogawa, Shiki puede liberarse fácilmente al finalmente recuperar la conciencia, y confrontar y superar a Araya en la batalla. Araya se da cuenta de que Shiki no estaba usando todo su potencial contra Fujino Asagami.
Araya, luego de saltar del apartamento, intenta aplastarla derrumbando el complejo de apartamentos, pero Shiki lo alcanza mientras cae y lo apuñala en la Línea de la Muerte en su hombro izquierdo. El último cuerpo de títere de Araya se destruye así, habiendo sufrido más daño del que puede soportar. Antes de aterrizar en el suelo, activa un campo delimitado para protegerse y así salvar a Shiki también. Touko tiene una conversación final con Araya, donde Touko le pregunta por qué estaba obsesionado con el Remolino de la Raíz. Araya revela que después de presenciar la muerte de tantos humanos, quería preservar la totalidad de la humanidad en un registro. Touko afirma que su caída fue causada por el amor de Tomoe por su familia, así como por romper el ciclo creado por Araya. Antes de su muerte,Arayashiki . Luego de que ella le pregunta si va a seguir buscando el Remolino de la Raíz, Araya dice que ya no tiene más cuerpos de repuesto y muere, aunque dice que cuando su alma regrese al mundo material, seguirá con su investigación aún más. si está solo después de cientos de años. Con la muerte de Araya, Lio pudo realizar su propio deseo.
Capítulo 6[]
Satsuki Kurogiri reveló que Araya se puso en contacto con él para ayudar a despertar los recuerdos olvidados de Shiki.
Habilidades[]
Araya, como alguien que ha vivido durante siglos utilizando diferentes cuerpos como contenedores de su alma, puede ser considerado más un monstruo o muerto viviente que un ser humano. Incluso fuera de su barrera, tiene un cuerpo increíblemente poderoso que es capaz de perforar concreto y esquivar balas. Se dice que Himon Yoruma Mugen Roku (秘紋・夜摩無間禄, ?) es su movimiento especial.
Hechicería[]
Araya puede ser considerado un hechicero promedio con treinta circuitos mágicos, que no son muchos en comparación con un hechicero de primer nivel como Cornelius Alba, pero todavía puede ser considerado un genio con un poder abrumador resultado de la angustia que acumuló incesantemente a lo largo de los siglos. Souren tiene la capacidad de ver el origen de las personas y despertarlo, sin embargo, debe recibir el consentimiento de la persona para hacerlo. Su origen es Quietud (静止, Seishi?), y el haberlo despertado lo ha hecho extremadamente difícil de matar, ya que algo que ya está «inmóvil» supuestamente no puede ser eliminado. Esto hace que sus líneas de la muerte sean difíciles de ver, teniendo líneas muy débiles alrededor de su cuerpo y un grupo de ellas similares a un punto en su pecho, lo que demuestra que todavía es capaz de morir. Touko cree que a diferencia de los hechiceros que se desvanecerían si alguna vez tocan la raíz, al menos una sombra de sí mismo permanecería en el mundo y posiblemente traería una gran destrucción.
Tiene un Śarīra, los restos sagrados del Buda, incrustados en su brazo izquierdo. Perteneció a un iluminado que logró «extinguirse/vivir», por lo que tiene una resistencia a los Ojos Místicos de Percepción Mortal. La capacidad de matarlo cortando las líneas de la muerte requeriría que Shiki descifrara las «líneas avanzadas de la muerte» que son niveles más altos que el concepto normal de la muerte, por lo que no puede ver partes tan vulnerables al mirarlas. Todavía son solo huesos en el sentido físico, por lo que son susceptibles de quemarse hasta convertirse en cenizas y la fuerza de un gran impacto puede destruirlos incluso con su protección natural.
Él es efectivamente inmortal en cierto sentido debido a que su conciencia sobrevive incluso si su cuerpo se pudre y se convierte en polvo. Contrario a un titiritero que prepara los cuerpos por adelantado en caso de morir, Souren se transfiere a un cuerpo de títere de repuesto que se aclimata lentamente a su alma. A diferencia de Touko, que tiene que morir antes de cambiar a su siguiente cuerpo, Araya nunca ha experimentado la muerte y, en cambio, traslada su conciencia a otro cuerpo. Los circuitos mágicos, el cableado que mueve su forma física, llega a través del cuerpo y sublima el cuerpo temporal en algo real. Con mucha experiencia en poner cuerpos físicos bajo su control, habiendo pasado por muchos cuerpos en su vida, puede completar el proceso en medio día. Es una existencia solitaria, y aunque no puede huir si su cuerpo es destruido, después de que su último cuerpo de marioneta sea eliminado, tanto él como Touko señalan que terminará regresando con el tiempo, ya que los ojos místicos de Shiki solo destruirían su cuerpo físico y no su existencia en sí, debido a haber golpeado una línea de la muerte distinta.
Barrera[]
A pesar de ser un hechicero promedio, su talento relacionado con la construcción de barreras es extraordinario. Son lo que divide lo que está dentro de lo que está fuera, por lo que primero debe completarse a sí mismo para construir un mundo completo a partir de su propio cuerpo. No tiene talentos excepcionales, pero pudo convertirse en un maestro de barreras de primera clase al completarse a sí mismo a través de la acumulación de años y pura determinación. Normalmente algo imposible, sus logros son como alcanzar el pináculo dentro de un campo sin tener en cuenta ni siquiera el nombre de este campo temático.
Souren lleva consigo la Rokudou Kyoukai (六道境界, ?), una barrera de tres capas que rodea completamente su persona y oculta su presencia. Todos aquellos que ingresan al perímetro del campo exterior están completamente congelados en su lugar de acuerdo con su origen de «Quietud», y como es móvil, algo normalmente imposible de lograr, puede usarlo libremente como arma. Se está desvaneciendo constantemente con el paso del tiempo, y a Souren le toma mucho tiempo recrearla. Evoca los nombres Fugu (不倶, ?), Kongou (金剛, ?), Dakatsu (蛇蝎, ?), Taiten (戴天, ?), Chougyou (頂経, ?) y Ouken (王顕, ?) al usarla.
También ha construido la Hounouden Rokujyuyonshou (奉納殿六十四層, ? lit. Las 64 capas del templo de Hounou), una barrera que rodea completamente su taller, el complejo de apartamentos Ogawa. El arquitecto original fue Touko Aozaki, y es un santuario para el Taikyokuzu, el diagrama del supremo definitivo. El edificio puede considerarse la encarnación de su mundo interno, muy similar al concepto de esfera de realidad, que le da un control completo sobre su funcionamiento. Touko nota que la barrera ha dejado el reino de la hechicería y ha entrado en el reino de la magia. Dentro del complejo de apartamentos, obtiene la capacidad de teletransportarse instantáneamente a cualquier lugar dentro de su barrera, la omnisciencia de cualquier suceso dentro del edificio y la capacidad de aplastar el espacio mismo, Shuku (肅, ?). Cuando está dentro de la barrera, Touko afirma que se siente como estar dentro del cuerpo de Araya.
El edificio es un edificio cilíndrico de diez pisos con cinco habitaciones en los lados este y oeste. Para crear esta barrera, reunió 64 familias y las condujo a 64 tipos distintos de muerte, simbolizando los 64 hexagramas. Eventualmente, esto fue condensándose en los ocho trigramas, luego los cuatro fenómenos, luego el yin y el yang — el Ryougi —, creando un «mundo» completamente nuevo separado del exterior de la barrera. El edificio en sí usa patrones y colores repetitivos para llevar a sus residentes a la locura y, finalmente, al asesinato y al suicidio. Luego, les quita el cerebro y crea cuerpos de títeres idénticos para controlarlos. Usa estos cuerpos para crear un «mundo en miniatura que concluye en un día», donde haría que todos los títeres representaran su vida diaria hasta hacer que se maten unos a otros.
Souren, con la esperanza de que sus muertes se desviaran de los días anteriores, revivió los cuerpos por la mañana, donde simplemente reiniciarían con los recuerdos del último día de sus vidas. Los títeres viven en un lado, mientras que el otro, oculto por un ascensor giratorio, se utiliza para almacenar sus cadáveres originales. Souren se las arregla para ocultar el experimento masivo, que normalmente causaría sospechas incluso por la más mínima irregularidad y el rastro de información en la sociedad moderna, haciéndolo parecer un apartamento normal. El propósito es hacer que el edificio forme un taiji, una representación gráfica de la teoría Yin-Yang, y con Shiki, otro taiji colocado dentro del taiji del edificio, Araya podría alcanzar la raíz.
Taijitu es una filosofía originada en la antigua China que intenta capturar la esencia de todo a nivel conceptual. El movimiento se define como Yang, representado en color blanco, y la quietud se define como Yin, representada en color negro. Simboliza conceptos opuestos como el día y la noche, la luz y la oscuridad, y masculino y femenino. Al mismo tiempo, también puede considerarse una versión condensada del mundo dinámico y en constante cambio. Existe un punto de Yin dentro de Yang y un punto de Yang dentro de Yin, lo que indica que la distinción entre Yin y Yang no es absoluta. En el Onmyoudou, la separación del taiji como Yin y Yang se llama Ryougi.
Curiosidades[]
- El título de la obra, Fronteras del Vacío (空の境界, Kara no Kyoukai?), refleja el papel del personaje de Araya, ya que simboliza la espiral paradójica que divide el interior del exterior y el evento más importante de la historia.
- Él encarna el «accidente de no saber lo que es verdadero y falso», y el «accidente de no aprender la verdad que se ha convertido en conocimiento común». Como resultado de eso, se determinó como absoluto que la paradoja persistiría hasta el final.
- El papel de Lio como antagonista no encajaba en el ámbito completo de Kara no Kyoukai., sirviendo más como parte de la historia de Araya en torno a sus manipulaciones. Como tal, se suponía que el papel de Lio terminaría antes de que Araya se presentara como el «autor intelectual del mal». Sin embargo, con el fin de proporcionar una resolución a la historia de Mikiya Kokutou y Shiki Ryougi, el papel de Lio como el verdadero asesino en serie fue un factor vital para que se convirtiera en el antagonista final de la serie.
- Kinoko Nasu culpa en broma a Araya por la crisis de las hipotecas de alto riesgo en Estados Unidos y el retraso en la venta del volumen 3 de DDD.